“La última colonia europea en América del Sur desprecia a sus habitantes y es francesa. Es tiempo de que obtenga su independencia. Los demás estados americanos del sur deberían apoyar en este sentido.”

Por el bien de Guyana y de Francia, es conveniente que un proceso de emancipación se entable y sea conducido a su término, ahora que la sociedad civil guyanés mostró su cohesión. Hasta ahora, la fragmentación de esta hacía de Guyana un caso aparte entre los territorios y regiones que deberían, a medio o corto plazo, separarse del territorio francés. Las asambleas de estas últimas semanas muestran que Guyana alcanzó un estado de madurez por constituir una sociedad unificada y a la vez diversa que tomará a cargo este rico territorio de 91,000 km2, siendo tres veces la superficie de Bélgica.

Francia se enfrenta en Guyana a una situación perdida en todos los casos:

Si invierte de forma masiva y eleva las condiciones de vida y las infraestructuras a nivel de la metropoli, esto provocará una afluencia considerable e imparable de las poblaciones necesitadas de los países vecinos: Suriname, norte de Brasil, Guyana,…

Si no invierte, el descontento irá creciendo y entonces se hundirá en los conflictos sociales en repetidas ocasiones y perderá el control del país y la base espacial de Kourou.

En un caso como el otro, Guyana se volverá para Francia un gasto desmesurado en recursos humanos y financieros. Así que es preferible para las dos partes de comprometerse desde ahora en un proceso responsable y constructivo de separación.

Diane Brisebois, Responsable del Movimiento Raeliano de Guyana ve con buenos ojos que el futuro estado independiente de Guyana pueda ser el lugar de la construcción de la Embajada que el Movimiento Raeliano prevé en los próximos años para recibir a los Elohim, creadores extraterrestres de la humanidad. “Haremos saber al pueblo guyanés que estaremos detrás de su independencia, en nombre de la justicia entre las naciones y de un buen sentido geopolítico. Si sucede que después este estado libre e independiente nos ofrece la extraterritorialidad necesaria para nuestro proyecto de la Embajada, esta nueva nación constituida atraerá inmensas ventajas. ¿No sería natural que el país que envía cohetes al espacio fuera el primero en recibir a visitantes del espacio?” Declara.